Home of ChanRobles Virtual Law Library

PHILIPPINE SUPREME COURT DECISIONS

SECOND DIVISION

[G.R. No. L-5547. April 29, 1954. ]

EL PUEBLO DE FILIPINAS, querellante y apelado, contra PEDRO MANANTAN y OTRO, acusados y apelantes.

D. Pedro D. Maldia en representacion de los apelantes.

El Procurador General Sr. Juan R. Liwag y el Procurador General Auxiliar Sr. Francisco Carreon en representacion del apelado.


SYLLABUS


1. DERECHO PENAL; ASESINATO; CUANDO LAS CIRCUNSTANCIAS QUE RODEAN EL DELITO INDICAN EVIDENTE PREMEDITACION, LA DEFENSA DE QUE EL ACUSADO SOLAMENTE ACTUO CON NEGLIGENCIA ES INSOSTENIBLE. — Si mas de ochenta personas, estrategicamente escondidas en ambos lados de la carretera, descargaron tiros de armas de fuego contra coches con pasajeros, dichas personas no pueden alegar con exito que solamente actuaron descuidadamente con negligencia, imprndencia y falta de prevision, porque no existe duda alguna de que su proposito era matar a todos los que estaban en los coches sin ningun peligro a sus personas; el delito cometido es asesinato y nada ma s.

2. ID.; ID.; EL ACUSADO EN EL CASO CITADO SE DISTINGUE DE LOS ACUSADOS EN EL PSESENTE ASUNTO EN QUE DISPARARON CON INTENCION ORIGINAL CONTRA VARIOS COCHES CON PASAJEROS. — El caso citado por la defensa (cuestion 16, 7 Viada 5.a 28) no es aplicable el caso presente, porque el acusado en dicho asunto no habia disparado contra determinada persona, sino que "sin saber el sujeto, sale un tiro que mata a una de aquellas personas." En el presente caso, sin embargo, unas ochenta personas armadas dispararon con evidente alevosia contra los coches de la comitiva de la viuda de Quezon. Su intencion no era dañar solamente a los coches sino matar a los pasajeros que estaban desprevenidos de todo aquel ataque criminal.


D E C I S I O N


PABLO, J.:


En la mañana del 28 de abril de 1949, Doria Aurora Vda. de Quezon y su comitiva, en varios coches, iban en direccion a Baler para asistir a la inauguracion del monumento erigido en honor del Presidente Quezon cuando al llegar al sitio llamado Salabusub, dentro de la jurisdiccion del municipio de Bongabong, Nueva Ecija, fueron traidoramente atacados por unas ochenta personas que estaban previamente escondidas en sitios estrategicos a ambos lados de la carretera.

En el primer coche, manejado por el capita n Primitivo San Agustin, iban en el asiento delantero Maria Aurora (Baby) Quezon y Felipe Buencamino III, en el trasero, Doña Aurora Vda. de Quezon, en la derecha; el alcalde Ponciano Bernardo de la Ciudad de Quezon, en el centro, y el General Jalandoni en la izquierda. El siguiente coche era un jeep en donde estaban el capita n Olimpio Manalang con el teniente Fausto Lazam, comandante del destacamento de Baler, el cabo Fausto Almirañes y los soldados Silverio Raymundo y Brigido Valdez. En el tercer coche iban Antonio San Agustin con el teniente Arabejo, y en otro jeep estaban el chofer y el cocinero de Doña Aurora. En el otro coche estaban una hermana de Doña Aurora, una sobrina y dos criadas, Dr. Quisumbing y Dr. Olandi y señora.

De resultas de la emboscada fallecieron Doña Aurora Vda. de Quezon, su hija Maria Aurora, el alcalde Ponciano Bernardo de la Ciudad de Quezon, el capita n Primitivo San Agustin, el comandante Antonio San Agustin, los tenientes Dominador Arabejo y Fausta Lazam, el cabo Quirino Almirañes, el soldado Brigido Valdez y Pedro Payumo. Felipe Buencamino III, que fue gravemente herido, fallecio a la media hora de su llegada en el hospital provincial de Nueva Ecija.

Algunos soldados de la constabularia que estaban en pos consiguieron escaparse para pedir socorro; pero, a la llegada del refuerzo de dos compañias, los atacantes ya habian desaparecido.

En 10 de mayo de 1949 el teniente Amante de la constabularia presento una denuncia ante el juzgado de primera instancia de Nueva Ecija, con una mocion de la fiscalia pidiendo que la investigacion preliminar sea celebrada en la cabecera de la provincia, Cabanatuan, Nueva Ecija. En la querella enmendada presentada en 25 de noviembre de 1949 por el fiscal provincial en el juzgado de primera instancia, solamente aparecen los nombres de Pedro Manantan, Federico Cachuela, Vicente Marquez, Antonio Reyes y Raymundo Viray. Por la gravedad del delito, el juzgado nombroabogados de oficio a los Sres. Pedro D. Maldia y A. F. Ruñes; este ultimo fue muerto antes de la vista de la causa en otra emboscada en Talavera de la misma provincia.

Todos los cinco acusados, despuEs de la vista, fueron condenados a la pena capital. Contra esta decision los acusados apelaron.

El Procurador General, en su informe, recomienda la absolucion de los apelantes Antonio Reyes, Vicente Marquez y Federico Cachuela, por la razon de que las declaraciones juradas de los mismos admitiendo su culpabilidad fueron obtenidas por medio de la tortura; que las declaraciones de los constabularios son increibles. Las pruebas obrantes en autos apoyan esta recomendacion.

Pedro Manantan se presento ante el teniente del barrio de Sta. Ba rbara, San Jos, Nueva Ecija, y fu
Top of Page